Agustín Gonzalez era uno de los mejores actores que aun nos quedaba de lo que se suele llamar la vieja escuela. Trabajó con los mejores directores españoles y participó en más de 180 películas y decenas de obras de teatro durante cincuenta años de carrera.La verdad es que me sorprendió mucho la noticia de su muerte precisamente cuando no hace tanto lo veiamos aparecer de actor invitado en "Siete Vidas" haciendo de padre de Diana.
Personalmente sus interpretaciones que más recuerdo y que en su momento me hicieron reir bien a gusto fueron la de "La escopeta nacional" y su papel de comisario estresado -y puteado- en la serie "Los ladrones van a la oficina".
Agustín Gonzalez era para todos en general, imagino, ese tipo de actor de las películas de toda la vida, ese personaje que aparece en una película e inmediatamente reconoces como uno de los profesionales secundarios magnificos que hacen creible su papel y que, ya de entrada, te dibujan la imagen mental del ser que interpretan.
Lo dicho, una triste perdida para el cine y para el teatro español que, como decía creo que Berlanga, "encabrona" además de apenar porque sabes que no tiene reemplazo igualable en la escena.
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